lunes, 10 de enero de 2011

CUETO-COVENTOSA ALGO MAS QUE UNA CUEVA

INTRODUCCIÓN
Esta descripción de la travesia esta basada en impresiones, sensaciones, sorpresas, y experiencias vividas tras la realización de la travesia Cueto Coventosa, no trata de ser una descripción fiel y exacta de la cueva. Para tener una información completa a la hora de realizar esta travesia en esta web se puede encontrar toda la información necesaria para realizarla:
http://www.ramales.com/cueto/cueto.htm

CUETO-COVENTOSA ALGO MAS QUE UNA CUEVA
Domingo a las 23:30 recibo una llamada del Pepino(José Ignacio),
- Quillo nos vamos pa cueto el jueves te apuntas?,
- Umm, eeeh, uummm, si… , pero no puedo salir el jueves creo que el viernes .podría pero tendría que verlo, te lo confirmo.
- Ok voy a llamar a Javi y a Gabi a ver que dicen.
- Ok. (Cuelgo)
Umm creo que acabo de decir que me voy para Cantabria y no he pedido vacaciones en el trabajo, ni pensado si quiera que podría tener el próximo finde. Raquel esta a mi lado y me pregunta quien te ha llamado, aun pensando en lo que acababa de decir le digo “Umm, eh, me voy a Cantabria a hacer unas cuevas”.
Así comienza esta aventura, al final salimos el Viernes por la mañana todos de acuerdo y por suerte no tenia ningún compromiso a la vista. En esta edad cuando no tienes bodas, son bautizos, o cualquier evento social ineludible.
El jueves con todo el material preparado comienzan algunos pequeños detalles que me avisan, no vallas, vas a tener problemas. El coche no me lo tienen a tiempo me encontraba a 200 Km. de Chiclana donde estaba todo el material, mi Padre, como siempre al rescate, me dice que me lleve el suyo, él se encargaría de recogerlo. Solucionado, salgo para Chiclana y a 3 Km. del desvío de la autopista de repente, humo en el capo del coche, me paro y la cosa pinta muy mal, llamo a la grúa, me quiere llevar de vuelta al lugar donde salí, 180 Km. para nada¡¡, después de duras gestiones con el seguro me ponen el taxi para llegar a Chiclana y mando el coche a Chucena previo pago de 60 euros por kilometraje extra de la grúa. Ya en casa, preparo el equipo y salimos el Viernes, POR FIN¡¡¡. Ese mismo día recogieron mi coche del taller y por la tarde me llamo mi hermano que se había estropeado el alternador, joder, vaya tela con los coches.

El viaje hacia Ramales de la Victoria(Cantabria) lo hacemos relativamente ligeros en 9 h. Nos plantamos allí por Mérida, haciendo una breve incursión en Portugal gracias a Javi y pequeñas distracciones en la conducción.

En Ramales comenzamos a buscar información, para orientarnos mejor de la entrada, salida y quizás novedades, tuvimos mucha suerte, en el albergue de la Federación Española de Espeleología (Lo conocían en el pueblo por los Castores) encontramos a Rocío, regenta el albergue, nos indico que hay un nuevo acceso por carretera que te ahorra una hora de pateo y se ofreció a llevarnos. Decidido, mañana a las 7:30 salimos para la boca de entrada. Esa noche dormimos en la salida de la cueva, en plan fatiga, me imagino que por los nervios de la travesía que íbamos a hacer y por el presupuesto que llevábamos. Quedamos con Rocío en la salida para dejar nuestro coche allí, a las 7:40 llego nuestro vehiculo, una furgoneta transporte con cama incluida, nos montamos y en poco tiempo estábamos subiendo por unas pendientes que personalmente creo que suben cabras, locos y aborígenes varios. En una curva hacia la izquierda nos para Rocío y nos indica cual es la senda, le damos las gracias y quedamos que en cuanto salgamos la avisamos. La moral muy alta y los petates también, preparados para andar y casualmente… todos tuvimos la imperiosa necesidad de abonar los árboles centenarios que había a nuestro alrededor.

Comenzamos la senda muy animados a buen ritmo pero dosificando bien la energía, observando las vistas del amanecer en el valle desde las alturas. Cuando perdemos la senda sacamos el GPS y nos dejamos guiar, nos convertimos en vulgares Cabras Montesas trochando monte y lo que se pusiera por delante, total nos íbamos a ahorrar una hora de caminata. Por fin dimos con la senda que lleva la tubería de agua, según las descripciones que habíamos leído, la seguimos, cuando ya estábamos a 300 metros de la cueva, según el GPS, giramos hacia la izquierda al salir de un pequeño bosque precioso con un lapiaz a la izquierda, 4 horas después de patear el lapiaz en todas sus vertientes llegamos al mismo punto donde habíamos girado hacia la izquierda y a 100 metros a la derecha estaba la entrada las 13:45h. Lo que podría haber sido una aproximación de 2h se convirtió en un calvario de 5 horas. Paramos a comer y reponer fuerzas y al pozaco¡¡¡.

A las 14:10 aprox. entramos en la cueva, un pasamanos inicial te asegura para instalar el primer rapel, Gabi comienza con la segunda cuerda de progresión… lo perdemos de vista y una simple luz indica donde se encuentra, en dos palabras como diría un famoso torero de Ubrique, im-prezionante. Detrás suya desciende José Ignacio, las cuerdas se lían un poquillo y tardamos bastante en desliarlas, en el segundo Rapel ya hemos cogido la técnica y ya no se nos liaría. Después de Gabi desciendo Yo(José Carlos) y por ultimo Javi. Colgados como jamones en la tercera reunión José Ignacio y un servidor, escuchamos, va cuerda¡¡¡¡, nos reímos hacemos algunas bromas y nos arrimamos un poco a la pared, el sonido de una cuerda al caer lo había escuchado muchas veces pero… a esa velocidad y sin poder moverte… no veas el latigazo que eso pega, se hizo el silencio por un momento y… “jajaja, habeis fallado¡¡¡”, le quitamos importancia, la siguiente tirada de cuerda Jose Ignacio y yo eramos salamanquesas a la pared, diria que gusanos buscando cualquier hueco para escondernos. Esta parte viene muy bien descrita en Internet y estaba todo reequipado de noviembre de 2009, según nos comentaron, así íbamos bajando reunion tras reunion hasta 320 metros haciendo una parada intermedia a 196 metros en una repisa para un merecido descansito, las antiguas reuniones nos vinieron muy bien para estar mas cómodos cada vez que estábamos tres en la misma reunión pero aun no se como siguen aguantando. Una vez llegado a la base del pozo comienzan sucesivos rápeles, instalados con cuerdas fijas, destrepes, pasamanos hasta llegar a un rapel vertical, al final, que rozaba la cuerda, instalamos la nuestra y descendimos a una amplia galería. Fuimos hacia la izquierda para recoger agua según nos indicaban las descripciones y tras una pequeña búsqueda la encontramos sin mas problemas, repusimos agua, e iniciamos la progresión hacia la derecha siguiendo las esfera de reflectantes que te guían en la oscuridad. A las 19 h nos encontrábamos a - 585 metros aprox. desde la entrada.

Entre caos de bloques, subidas y bajadas pasamos la galería de las once horas, en una bifurcación nos paramos a ver por donde seguía y comenzamos a explorar en distintas direcciones, la mía fue la peor una roca se movió mientras estaba encima y resbale chocando la espinilla contra otra piedra, la caída fue algo aparatosa y me imagino que el susto no fue mio solo, me levante enseguida y comencé a andar, la herida que me había hecho tenia mala pinta pero no me impedía nada, el miedo me volvió mas cauteloso y los tres estuvieron pendiente de mi hasta ver que iba bien, quizás fue mas la inseguridad que me creo la caída que la propia herida. Poco a poco fui ganando de nuevo seguridad. He de reconocer que la vida a veces te trata igual, muchas veces no es tanto la caída como el miedo que te genera comenzar a andar, la superación y el entrenamiento en este tipo de situaciones te ayuda a afrontar situaciones cotidianas desde otro punto de vista, y actuar de otra manera, en cierto modo es como un campo de entrenamiento, por tanto, “dejen de ir al Psicólogo, entren en cuevas¡, afronten sus miedos¡¡”. Entre caos de piedras y pequeñas pendientes con arena, unas espectaculares formaciones nos dejaban entrever lo que nos esperaba. Techos a mas de 100 metros de nuestras cabezas que bajaban a saludarnos a menos de 2-3 metros en algunas bajadas. A las 21h. horas llegamos al Oasis, el agua caía desde el techo colándose por cualquier recoveco, en algunos puntos había botellas o garrafas que recogían el agua de esas gotas, agua mineral a 600 metros de profundidad. Una barrita y seguimos. A las 22h. llegamos al pozo de la Navidad, Una vez descendido avanzamos por una galería con formaciones blancas, supongo que serán de Navidad, mas que por el parecido, por las descripciones que había leído antes de entrar. A las 00h. Aprox. Llegamos al espeleodromo, oposiciones, sube, baja, trepa, destrepa, abre las piernas, agacha la cabeza, bendito casco¡¡¡, con cuidado vamos avanzando, en algún punto sentimos corriente de aire y creemos que esta ya el agujero soplador pero no hacen mas que minar la moral, el cansancio de 9-10 horas desde el inicio comienzan a hacer mella. Alguna diaclasa algo mas expuesta, y el sube y baja habitual parecen que a José Ignacio le vengan como anillo al dedo, progresa como un gato pero el ritmo de la manada se impone; así, en esta parte, haría el recorrido dos veces, va y viene, esta fuerte. Yo dosifico, Javi comienza a notar el cansancio y esta zona no creo que sea su favorita, Gabi continua su ritmo constante. El cansancio de todo el día, la caída y la cruzada mental contra los elementos nos hace reducir bastante el ritmo y comenzamos a dosificar fuerzas son 17 horas desde que nos levantamos en las cuales hemos realizado pequeños descansos para comer algo, cada 4-5, intentamos llevar el ritmo de comidas. Túneles increíbles, parecían que habían sido escavado por una maquina de taladrar perfecta, por algún momento pensé “vaya equipo de desobstrucción tienen en Cantabria” , la cabeza seguía por aquellos lindes cuando en medio de todo este ajetreo dimos con el pozo de la unión, después mas de lo mismo. Se que tienen distintos nombre las salas que vamos pasando pero en esta fase de la travesía llevábamos puesto el piloto automático, si uno tardaba 2 min. mas en pasar un paso nos sentábamos y descansábamos, por lo que no recuerdo muy bien salas y nombres.
A las 5:00 aprox de la mañana llegamos al agujero soplador un pozo de 17 metros algo estrechito, la corriente de aire se notaba y el frío hacia que te pusieras algo mas irritable, José Ignacio intento bajar primero con el petate y se quedo este encajado, cambio de aparatos y de nuevo para arriba, el poco espacio, el viento y las ganas de continuar hace que tomemos decisiones algo mas ligeras, Gabi baja sin petate y pasa bien, se coloca debajo del paso y le comenzamos a enviar petates desechos, neoprenos por un lado, bote estanco por otro, otro neopreno, entre tirada y tirada desciende Javi, después yo y al final José Ignacio. En la base del pozo, comimos barritas, cambiamos el peto por el neopreno, solo pensar volverlos a meter en los petates resultaba un gran esfuerzo. El frió que habíamos pasado nos termino de convencer para ponernos los neoprenos, José Ignacio continuo con el peto, seguía fuerte. Comenzamos otra galería esta vez mas ancha que desemboca en una tirolina de cable que te hace cambiar el animo. Nos tiramos y el aterrizaje es en una playa de arena perfecta para acogerte entre sus brazos y dormir, dormir y dormir, allí descansamos lo que me parecieron 8 horas durmiendo, aunque en realidad serian 5-10 min. lo suficiente para que alguno roncara y todo.
En breve llegamos al inicio de los lagos ,serian las 6:30 sacamos nuestras colchonetas hinchables, yo la barca hinchable que me había dejado mi hermano y a soplar aire. Como fuimos muy valientes cargamos con todo desde el inicio y no entramos el día anterior por Coventosa para reconocer la salida y dejar preparados los botes estancos., esto nos pasaría factura después. Allí estábamos Neoprenos puestos y colchonetas hinchables, el agua estaba helada. Decidimos cruzarla en colchonetas y petate a la espalda pero como yo llevaba la barca, mi trabajo me costo inflarla, cargue con 3 petates en el primer largo, di dos viajes, y a partir del siguiente uno algo mas cargado. A Gabi se le fue desinflando poco a poco la colchoneta y un giro inesperado hizo que cayera al agua soltando la colchoneta y saliendo a nado. A Javi le paso algo parecido pero aguanto encima de la colchoneta valeroso y apenas con una gota de aire aterrizo en la orilla, no sin estar prácticamente empapado. Pepino seguía fuerte parece que las adversidades le hacían aun estar mas en forma, lo perdí de vista y creo que iba andando por encima de las aguas, o eso me pareció ver. A las 6:30 iríamos saliendo de los lagos, una bifurcación, ¿derecha o izquierda? nos hizo dudar, giramos a la izquierda y al poco de andar por arena de playa nunca pisada, decidimos regresar y tomar el camino mas evidente hacia la derecha que es donde discurre el río, hay pequeñas rampas a la derecha que parecen pueden ser salidas incluso vicheamos algunas, creo que mas por sacar los pies del agua helada, sin escarpines se congelaban los pies hasta el punto de no sentirlos.
Cuando el río se pierde, comienza a agrandarse la galería y tomamos una curva hacia la izquierda donde nos encontramos la sala de los gours, cada vez se ven mas formaciones y un lago nos impide el paso, dudamos, volvemos a los gour y sacamos nuestras reseñas, el cansancio nos hace ver interpretaciones distintas, veo una cuerda y a lo lejos me parece ver un reflectante, miro una y otra vez, y el reflectante me parecía un muñeco de los que tienen los pasos de peatones para pasar que no dejaba de andar en el mismo lugar, cierro los ojos, los vuelvo a abrir y de nuevo seguía andando, llamo a José Ignacio y le digo ¿ves allí un reflectante?, me lo confirma y dadas las circunstancias decido no contar nada. Vamos justos de fuerzas y subimos a la gran roca que hay en el centro del lago por una cuerda y en el otro extremo encontramos otro cacho de cuerda para bajar, esta vez hay que mojarse hasta la cintura. A partir de aquí un gran pendiente se eleva ante nosotros y parece que un filo hilo de coser indica que hay que ascender, las pisadas lo corroboran y las interpretaciones de las reseñas también, así que ¡¡¡vamos hacia arriba!!! estamos cerca de la salida. Llegamos hasta un precipicio de mas de 200 metros de altura por un borde a gatas, la repisa no es que fuera muy estrecha pero la caída nos hacia ser precavidos y las horas de mas también. Llegamos mas allá de las marcas de pisadas y nada, de vuelta. Volvimos sobre nuestros pasos hasta llegar de nuevo a los gours, investigamos toda la pendiente bajando y en los gours los reconocimos hasta ponerles nombre. El cansancio y la cabeza nos podía hacer tomar decisiones precipitadas pero entre unos y otros entrábamos en razón. He de decir que estuvimos los cuatro buscando por todos los rincones que alcanzaba nuestra vista y un poco mas, decidimos turnarnos para ir a buscar la salida, Javi y Gabi comienzan a notar mas el cansancio y José Ignacio y Yo nos venimos un poco arriba, quizás por la adversidad, quizás por el coraje de estar perdidos o por la simple vergüenza de que no nos fueran a buscar. Comenzamos a avanzar subimos de nuevo la gran pendiente, bajamos giramos, desgiramos, hasta que encontramos una cuerda que parecía ser la continuación así andamos, para no extenderme mucho, por todas y cada una de las galerias hasta ir avanzando y encontrar algunas cuerdas, pasamanos, pequeña subida, mas pasamanos y al final un pasamanos con una reunion para bajar a una amplia galeria 20 metros mas abajo, imposible, decidimos, por aquí no puede ser, no podemos bajar tenemos que subir, y nos volvimos, reconociendo las pocas galerias que se nos habian escapado, asi estariamos 2 o 3 horas hasta, por no preocupar mas a Gabi y Javi regresamos a las sala de los gours donde se habian quedado descansando. Cuando llegamos nos lo encontramos tiritando y la cara palida, estaban cubiertos con la manta térmica y habían utilizado los medios humanos necesarios para calentarse un poquito y no tener que quitarse el neopreno. Les contamos nuestros avances y decepciones.
Tras deliberaciones y analizar las distintas posibilidades decidimos continuar por donde nos pareció mas evidente hasta llegar al Rapel de 20 metros, habíamos decidido instalarlo y explorar esa zona. Cuando llegamos al Rapel Javi y Gabi venían algo mas retrasados y al mirar para atrás e ir a buscar un petate a Gabi, me di cuenta que había una rampa que no nos habíamos percatado, comenzaba en dirección contraria a la que traíamos y no nos habíamos dado cuenta. Comencé a subirla y me pareció reconocer la zona, una gran pendiente, esta vez si coincidía con las reseñas nos ascendía hasta tocar el techo de la sala donde nos encontrábamos por un túnel pasábamos a otra galería que es donde se encontraba la escala instalada que da a la boca de Coventosa. Toda esta parte final casi la hicimos corriendo y entusiasmados, por fin la salida, la felicidad que sientes en ese momento es casi indescriptible mas si cabe si crees que llevas 7 horas perdido, cuando en ningún momento nos habíamos desviado de la ruta. En sí, siempre estuvimos en ruta, a pesar del cansancio, las horas en la cueva, el desgaste físico y todas las adversidades que habíamos superado, la mas importante fue el haber vencido a la mente a través de la superación, el trabajo en equipo y la voluntad de conseguir el Objetivo propuesto.
A las 15:25 estábamos todos fuera sentados viendo la luz del sol. Objetivo conseguido. No vuelvo a hacer cuevas en mi vida¡¡¡¡. Dos dias después realizaríamos Cuivo-Mortero Astrana en 4 horas. (por supuesto sin conocerla ninguno).

sábado, 28 de febrero de 2009

Via Ferrata Andalucia - Zuheros




Localización: Zuheros (Córdoba)
Dificultad: Facil.
ASPECTOS ATLÉTICOS (2): Presencia de algún pasaje atlético aislado.
ASPECTOS PSICOLÓGICOS (3): Presencia de varios pasajes aéreos y espectaculares; eventualmente, algún tramo excepcionalmente espectacular.
EQUIPAMIENTO (1): Equipamiento abundante y en excelente estado.
TERRENO (3): Pared inclinada; eventualmente algún tramo vertical o desplomado.
Acceso: Para llegar a la Vía Ferrata dejar el coche en el aparcamiento a la izquierda del puente. Desde el aparcamiento sale una senda hacia el cañón, subir por la izquierda sin entrar en el río. Hay un pequeño trepadero para llegar dentro del cañón, una vez que veamos el cañón seguir hacia la izquierda, entre un árbol y un abrigo se ven las primeras grapas.(están en gris asi que hay que aplicar un poco la vista).
Tiempo estimado: Depende del numero de personas 3 personas tardamos 1:30 aprox. desde que salimos del coche hasta que llegamos arriba parándonos tranquilamente a disfrutar de las vistas.
Descripción: La via comienza con una pequeña vertical de 4-5 metros aprox. Con las grapas bien juntitas, de aquí salimos a una pendiente que se hace andando hasta comenzar la vertical mas grande aprox. 30 metros a mitad de la vertical esta el paso mas complicado(dentro de la dificultad que puse anteriormente). Al finalizar la vertical gira hacia la izquierda subiendo por una senda asegurada buscando ver el pueblo de Zuheros. La vista de Zuheros espectacular. una vez visto el pueblo gira hacia la derecha andando y se llega a una vertical de aprox 20 metros. Una vez que se termina esta vertical se sigue caminando-subiendo hasta el mirador del bailón junto a la carretera que sube a la cueva de los murciélagos.
Regreso: Bajar andando por la carretera, cruzar el pueblo hasta el aparcamiento 20-30 min. Todo bajada.

Material recomendable:
-Casco.
-Arnés.
-Cabo anclaje con disipador de energía y mosquetones de seguridad de VF
-Cinta Express y mosquetones adicionales.
-Cuerda para asegurar al compañero
Epoca: Durante todo el año, cuidado con las prohibiciones, no por fecha sino porque es permanente, estaban en proceso de abrir algunas fechas o como querian unos ecologistas cerrarla al paso de gente

lunes, 7 de julio de 2008

Consejos para realizar una Via Ferrrata

- Una vía ferrata es un itinerario vertical equipado con diverso material: clavos, grapas, presas, pasamanos, que permiten el ascenso con seguridad a zonas de difícil acceso para senderistas o no habituados a la escalada. La seguridad corre a cargo de un cable de acero instalado en toda la vía y el arnés provisto de un disipador de energía y mosquetones especiales de Vía Ferrata que nos aseguran en caso de caída.
- Material de seguridad:
• Casco: imprescindible para prevenirlos daños de una caída fortuita de piedras. Aunque no parece muy importante, lo es.
• Arnés: mejor comprar uno cómodo y regulable en las piernas. Esto nos facilitará el ponérnoslo, independientemente de la ropa que usemos en cada estación.
• Disipador: elemento que en caso de caída amortiguará el golpe. Hay de diferentes tipos, lo mejor es consultar un especialista para comparar modelos y escoger el más conveniente. Está terminantemente prohibido hacer una vía ferrata sin este tipo de disipadores.
• Tercera baga o cinta Express: imprescindible para asegurarse al pasar los anclajes con el disipador, también en los momentos difíciles te dará seguridad y te permitirá descansar.
Siempre uno de los dos mosquetones del disipador anclado. Nunca hacer un cambio del disipador con los dos mosquetones a la vez. Asegurarse que los mosquetones siempre se cierran. Los dos mosquetones del disipador que estén contrachapados. Es decir, los cierres-roscas uno hacia cada lado, en sentidos distintos. Porque si hay roce con la roca, puede abrirse solo uno de ellos.
Con disipadores de placa, la cuerda sobrante que ha de correr en caso de disiparse ha de estar suelta totalmente. No llevarla enrollada en ninguna parte porque entonces no disiparía. Suele haber unos ganchos de plástico muy cómodos para que no moleste la cuerda sobrante y que saltan en caso de caída. Nunca dos personas ancladas en el mismo tramo de cable de vida, es decir, entre anclaje y anclaje del cable de vida a la pared. Sobre todo en tramos verticales, ya que si cae el primero arrastraría al segundo.
Evitar tirar piedras al progresar, ya que habrá más gente subiendo.
Lo más importante es que hay que estar seguro en cada paso, por tanto no se ha de hacer las cosas deprisa. En la montaña decimos "prisa mata". Avanzar con pies y manos sobre los peldaños de hierro e ir pasando el disipador por el cable de vida. Esto es lo básico. A veces no hay peldaño de hierro, así que se tendrá que usar la roca directamente.
Si se quiere descansar, colgarse de la tercera baga a un peldaño o punto fijo y se pueden soltar los brazos (e incluso las piernas). Si se quiere descansar a mitad de un tramo, buscar una posición cómoda y/o anclarse de la tercera baga para relajar brazos. Siempre mirad a los que te siguen si también están en situación cómoda antes de ponerte a descansar. En la medida de lo posible, no cogerse al cable de vida, porque no esta puesto para ello y es muy cortante.
Los mosquetones del disipador siempre es mejor llevarlos por encima de los brazos y cintura, porque sino suelen quedarse atrás y hay que retroceder un paso. En el momento que se llegue al anclaje superior del cable, anclarse con la cinta Express(o tercera vaga) al peldaño y pasar primero un mosquetón y después el siguiente, una vez pasado los dos mosquetones quitar la cinta Express y continuar hasta alcanzar el siguiente seguro.
Algunos libros para consultar:
-Vías ferratas : Catalunya, Aragón, Andorra y Pirineo Francés
ISBN (10): 84-607-7471-6 Autoras: Melus Fierro, Eva Ubach Pellicer, Chris Publicación: Mataró . Ubach Pellicer, Kris , 05/2003
-Vías ferratas y caminos equipados : 69 itinerarios en la Península Ibérica
ISBN (10): 84-95760-98-3 Autores: Forés Acle, Beatriz Cruz Sánchez Carrasco, Daniel Sánchez Carrasco, Xavier Publicación: Madrid . Ediciones Desnivel, S.L. , 04/2005
Vías ferratas de Europa
ISBN (10): 84-96192-95-4 Autores: Sánchez Carrasco, Daniel Sánchez Carrasco, Xavier Forés Acle, Beatriz Cruz Publicación: Madrid . Ediciones Desnivel, S.L. , 07/2005
-Marchas, ascensiones y ferratas por las Dolomitas
ISBN (10): 84-96192-05-9 Autor: Serrano Sánchez, José Luis Publicación: Madrid . Ediciones Desnivel, S.L. , 05/2003
-Nuevas ferratas y caminos equipados
ISBN: 978-84-9829-085-1 Autores: Beatriz Forés, Daniel Sánchez y Xavier Sánchez Colección: Ferratas (Guías) Junio 2007
-Ferratas. Técnica y seguridad. Pit Schubert ED. DESNIVEL